Partiendo de lo ético sabemos que
es ilícito hacer un fraude económico, político y social, que nos trasmitieron
desde el seno de la familia, cobijados bajo la presencia del temor de Dios. Fue
una formación de autoridad, criterio,
confianza, seguridad y decisión.
Con la migración hacia el viejo
continente y al país del norte, empieza a deteriorarse la familia y
desaparecen los valores morales, quedando escritos en el papel y guardados bajo
el polvo del pasar de los años.
La secuela del tiempo nos ha
pasado la factura, y el País, ha empezado a vivir la viveza criolla, de suponer que son inteligentes para fomentar
el crecimiento y desarrollo de la sociedad. Se crea el problema con esta viveza,
para ir jugando al azar, con
probabilidades de acertar bajo la agilidad del momento del poder, y ser
cobijados como un liderazgo de abrir trocha al
desarrollo espontaneo de la tecnología del siglo XXI, como lo llaman los
revolucionarios del momento.
Buscando diferencias entre el
pasado que fue una explotación del hombre por el hombre. Hoy estamos mejor sin
explotar, con educación, tecnología de punta, para ser competitivos internamente
y externamente, pero inútiles para tomar decisiones, esclavos del ego tecnológico,
pasando hacer el huasipunguero del siglo
XXI.
Hoy vivimos el destape de la corrupción, algo normal para la juventud, aprendiendo de la Universidad Politiquera de
la Revolución Ciudadana que gobernó con el eslogan “YA TENEMOS PRESIDENTE; LA PATRIA YA ES DE TODOS”. Como herencia nos
ha dejado. Ya tenemos un presidente que se dejó ver la intelectualidad de los
Doctorados que faltaron paredes para colgar los títulos, o simplemente nos ha votado un
pala de migaja, para construir
carreteras, someternos a la ignorancia más profunda de la
ignorancia de la comunicación, manejada desde las sabatinas.
Con el dominio de la comunicación, se
presentan hoy como corderos que no han sabido
nada de los actos de corrupción de sus ministros y su Vicepresidente, que son
actos de chantaje por defender al pueblo, para convertirse en perseguidos políticos.
Hoy vivimos el mismo cuento de la
caperucita roja, cambiando los actores de movimientos políticos. Hoy son: Morenistas, partidos resucitados vs los Correistas.
Empieza el dialogo. Porque tienes esos ojos tan grandes. Para mirar bien las
partidas presupuestarias, poder incrementar un cero a la derecha. Esas
manos tan grandes, para coger el peso de Odebrecht , otorgando el doctorado en
normas de calidad ISO por convertirnos en ingenuos e ignorantes del liderazgo de
Rafael Correa y darle el voto popular para cuatro años más.
Dar un aplauso, porque de una manera nos gobiernan los mismos
ministros de la revolución ciudadana, que no sabemos si son MORENISTAS O CORREISTAS, sin embargo, tienen sueldos pagados por el trabajo del
pueblo. A eso le llaman revolución
ciudadana.
Mientras el pueblo no despierte
de la quimera de la revolución, esperando el milagro que cambien las cosas por
arte magia, mientras los políticos, los políticos, discutiendo de la economía
entre los pasillos de la asamblea, se manejan
otro tic político. Un tic personal de seguir
amantando el poder del poder fracasado de siglo XXI.
Twitter. @Nixon63503951