miércoles, 29 de junio de 2011

La democracia en la realidad

La democracia como concepto es la solución a los problemas del hombre como sociedad y como ente político, porque permite una igualdad en los derechos como ser, y un crecimiento y desarrollo del hombre. Pero la realidad es otra, cuando toman la palabra democracia para cobijarse y crear los derechos de toda índole.
Tenemos los derechos del niño, los derechos de género, los derechos del anciano, los derechos de los padres, los derechos de la libertad de expresión, los derechos a los derechos.
Nace la oposición de la verdad frente a la verdad de confundir:
- Expresión por ecos
- Libertad por transeúnte
- Información por chismes
- Escritura por pasquín
- Lectura por pornografía
- Política por demagogia
Mientas el hombre no madure y tome conciencia de la realidad en donde vive y “Quien es”, el concepto de la democracia tomará otro rumbo a lo que estamos viviendo hoy, una Torre de Babel.

Nixon Maldonado Montaño

martes, 28 de junio de 2011

Que es democracia

Partimos de lo esencial que la democracia es el “gobierno del pueblo”, una definición griega y que abarca todo el contexto de la sociedad. Pero para este siglo XXI este concepto ha cambiando de acuerdo a la razón y que considero como el enemigo más fuerte del hombre frente a la realidad de su identidad.
La democracia pierde su esencia de ser el gobierno del pueblo para el pueblo y se ha convertido en una plataforma política de utilizar como un trueque. Obtengo un voto yo te doy un servicio básico. Pero más allá de esta realidad, el concepto de la democracia se transforma en un espejismo y falsedades, donde el pueblo sale perdiendo porque pierde su identidad, el origen y la capacidad de ser representado.
Para recuperar la verdadera democracia, tenemos que reconocer los errores.
1. De poder, Que mi verdad es única y prevalece
2. Elección Popular. De no jugar con la esperanza de un pueblo.
3. De gobierno. No considerar al pueblo como ingenuo
Esto significa que Yo soy servidor del otro, y la democracia empieza a funcionar, pero para eso hay que morir a la razón

Nixon Maldonado Montaño