Leyendo el
artículo donde tiene un final diciendo la verdadera justicia ha quedado escondida.
Hay contradicciones porque ahora están del otro
lado, probando el sabor amargo de someterse a la justicia de su propia justicia
que reformaron, están siendo esclavos de su propia conquista.
La verdadera justicia nuca se puede esconder, porque el hombre no tiene
el poder para opacar el poder de la palabra que es verdad y vida. Solo la
inteligencia del saber efímero puede dar un concepto o definición, aseverando
que el ser humano vive en las tinieblas de la ignorancia.
Porque ser ignorante no es insulto, pero si puedo insultar apuntando con
la palabra escrita de una adjetivo de lanzar un dardo de trilogías de palabras
de ego y resentimiento para caer en la demagogia de ser víctima de propia
verdad y codicia de poder político.
Es verdad que todo hombre es inocente hasta que se pruebe lo contario,
pero que hacer ante la erupción del gran volcán del siglo XXI definido como corrupción.
Baja de la gran MONTAÑA PROHIBIDO
OLVIDAR, de la veracidad hasta llegar a las planicies de un pueblo que fue
engañado y robado sus esperanzas.
Qué hacer ante estos ecos que taladran el tímpano como el mismo eco las
sabatinas de una década. Parece que
hemos olvidado, pero la verdadera justica no está escondida, está golpeando las
puertas del socialismo del siglo XXI para que diga la verdad, la verdad de la
inocencia como ser humano de la libertad individual en libre albedrío.